Capítulo 104: La peor tortura

Narrador en tercera persona

—Inclinen sus cabezas para la bendición de Dios —dijo el sacerdote, vestido con sus ropas ceremoniales. Estaba rodeado por un pequeño mar de personas vestidas con sus mejores atuendos de luto y rodeado por el ataúd de madera cerrado que acababa de ser bajado al suelo...

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