Capítulo 14.

El incidente que había ocurrido en el pasillo casi dos semanas atrás había dejado una marca indefinida en Tessa, nunca en su vida la habían llamado puta o zorra—no era exactamente modesta, pero sí era correcta. Gabriel, por otro lado, pensaba lo contrario sobre ella, la llamó puta—algo que ni siquie...

Inicia sesión y continúa leyendo