Capítulo 51

Lo primero que me vino a la mente cuando vi la rosa fue...

—Axel— susurré mientras me agachaba lentamente y recogía la caja y la rosa. La acerqué a mi nariz, inhalando, y su voz llenó mi cabeza.

—Una rosa para mi Rosa.

Se me hizo un nudo en la garganta. Dios, lo extrañaba. Extrañaba sus tonter...

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