Capítulo 78

El rugido no era solo un sonido—era vibración, fuerza, una cosa viva que desgarraba el aire y se filtraba en mis huesos. Era más profundo que el trueno, más agudo que el gruñido de un león, y sin embargo, llevaba algo humano en su tormento.

Las paredes temblaron, el polvo cayendo del techo, y mis h...

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