Capítulo 26 Tu magia está dormida

Dayleen abrazó sus rodillas, sintiendo el peso de esas palabras. Annika estaba a su lado, en silencio, su mirada perdida entre las llamas.

—¿Nuestra familia... tiene que ver con ellos? —preguntó, aún sin atreverse a decirlo en voz alta.

La anciana soltó una risa áspera.

—De algo incluso más antig...

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