30. Buena idea

—¿Entonces qué vamos a hacer? —pregunté a los chicos, los cuatro reunidos alrededor de la mesa del comedor.

Matt se encogió de hombros.

—Estoy bien con cualquiera de sus manadas, ya que la mía me echó.

Dijo esto con la sonrisa más amplia en su rostro. Me alegraba que Matt ya no sufriera el estrés...

Inicia sesión y continúa leyendo