Capítulo 257 Un gran malentendido

Ivy apenas había salido del laboratorio cuando su teléfono vibró.

—Señora Yates, algo pasa. Felicity acaba de desmayarse —soltó su asistente.

Los ojos de Ivy no mostraron ni un atisbo de preocupación, pero había un destello en ellos cuando preguntó:

—¿Por qué se desmayó?

—La llevamos de urgencia...

Inicia sesión y continúa leyendo