Capítulo 114

Me desperté sintiéndome como si me hubiera atropellado un tren de carga.

Cada músculo de mi cuerpo dolía, y mi cabeza latía como si alguien estuviera usando mi cráneo como tambor.

La curación de lobo estaba comenzando lentamente, reparando cualquier daño que se hubiera hecho, pero maldita sea, dol...

Inicia sesión y continúa leyendo