Capítulo 177

El páramo ártico se extendía interminablemente ante nosotros, un infierno blanco que parecía decidido a tragarnos por completo.

Cada respiración salía en nubes visibles mientras Freya y yo avanzábamos por la nieve hasta las rodillas, nuestra constitución de hombres lobo siendo lo único que nos mant...

Inicia sesión y continúa leyendo