Capítulo 39

La tensión entre nosotros se extendía como un arma cargada.

Alexander y Theodore me sujetaban las manos con firmeza, posesivos, mientras sentía que todo el salón de baile observaba nuestro drama.

‘Genial. Simplemente genial. Esto no es en absoluto como planeé pasar mi noche.’

—¿Y bien?— La voz de...

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