Capítulo 119

La voz de Dante era un ronroneo bajo, burlón, lleno de intención mientras se recostaba, sus ojos brillando con satisfacción depredadora. El pecho de Armani subía y bajaba, sus muñecas tensándose contra las esposas que lo sujetaban al cabecero, el metal mordiendo su piel. Su cuerpo era un traidor, re...

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