Lo siento, Randi-Pandi

Elicia:

Gimiendo contra el golpeteo detrás de mis párpados, escuché pasos apresurados acercándose mientras unas manos frías se deslizaban por mi rostro en un abrazo amoroso.

—Elicia, cariño. Abre los ojos para mí —la suave voz de Izzy habló dulcemente sobre mí, gimiendo en protesta mientras mis...

Inicia sesión y continúa leyendo