Nada a cambio

Un rugido amenazante emana desde lo profundo de mi garganta.

No puedo creer lo que está ocurriendo justo ante mis ojos. Mi compañera mira furiosa a mi mejor amigo y Beta, quien se vuelve hacia ella con culpa escrita en su rostro. Eric empuja a la mujer, con los ojos fijos en Ariel. Es como si su no...

Inicia sesión y continúa leyendo