Invitación

—¿Oye, Tyr?

—¿Hmm? —pregunté somnolienta, dándome la vuelta y subiendo las mantas alrededor de mis hombros. Aún no había amanecido, y me negaba a levantarme tan temprano.

Después de que Kairn me encontró en pánico, pasó los siguientes minutos calmándome, meciendo en sus brazos y asegurándome que h...

Inicia sesión y continúa leyendo