Capítulo 87- Roman

Frunce el ceño, lista para discutir y sé que he ganado. Su fijación con apelar a la lógica sube por su garganta como otra respuesta.

—No puedes decirme que no te importa el futuro; tu futuro.

—¿Por qué preocuparse por el futuro? —le pregunto—. Es lo que hacemos ahora lo que moldea el futuro. Solo ...

Inicia sesión y continúa leyendo