Capítulo 229 El tonto más grande del mundo

Me senté en la sala, sintiéndome inquieta e irritable. La revista en mi regazo no lograba captar mi atención, los programas de televisión parecían inútiles, e incluso navegar por mi teléfono no lograba distraerme.

Aunque me había negado a acompañar a Alexander a la cumbre de inversores en Portland,...

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