95. La formación de un ejército

La Manada del Lago Quimera

Ser el Alfa nunca debería ser tan fácil, pero así era. Inhalé el dulce aroma del té de menta y lo bebí. Frente a mí estaba la vista del mismo lago con el que había crecido. El viento causaba ondulaciones en la superficie. Me recosté en el porche, sin preocuparme por...

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