CAPITULO 56 - Mauricio Vela

Amara, con los ojos todavía hinchados de felicidad, sostenía entre sus dedos el anillo que Liam le había puesto la noche anterior. Lo observaba brillar y no podía evitar sonreír. Cada destello era una promesa, un recordatorio de que aún quedaban cosas hermosas por vivir.

Entró a la habitación de su...

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