Capítulo 82

La pequeña Viola estaba sentada en la mesa del comedor, empujando distraídamente su comida en el plato, aparentemente sin apetito. Con una expresión triste, miró a su padre.

—Papá.

—¿Sí, mi amor?

—¿Por qué no ha vuelto mamá todavía? Dijiste que regresaría hoy, ¿dónde está?

El corazón de Alexande...

Inicia sesión y continúa leyendo