Capítulo 45 Un momento para apreciar para siempre

Al llegar abajo, cargando a cada bebé, los fotógrafos se apresuran hacia nosotros para capturar nuestras fotos.

Posamos para ellos, sonriendo, con los ojos fijos en nuestros pequeños. Me inclino y doy un beso suave en la diminuta frente de Giana, y como por arte de magia, una sonrisa se dibuja en s...

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