Capítulo 296

Christina había estado ocultando esto a Sebastián, sin querer decírselo por esta misma razón.

Cuando se despertó por la mañana, el sol ya estaba alto en el cielo.

Christina soltó un suspiro y rápidamente se levantó para vestirse para ir al trabajo, pero Sebastián la agarró del brazo.

—Oye, acabas...

Inicia sesión y continúa leyendo