Capítulo 39

—Ya está cerrado—reportó rápidamente el subordinado.

Sebastian soltó un bufido frío, sonriendo con burla. ¡Si se atrevió a hacerlo, debe enfrentar las consecuencias!

Athena frunció el ceño profundamente. Al ver que Sebastian no podía ver a través de un truco tan simple, estaba verdaderamente exasp...

Inicia sesión y continúa leyendo