Capítulo 393

Christina agarró el brazo de Sebastián, sus uñas clavándose en su piel. —Para, no puedo más.

Los ojos de Sebastián estaban vacíos, como si no la hubiera escuchado, y siguió adelante, con fuerza.

Insatisfecho con su posición, volteó a Christina, inmovilizándola en la cama y levantando una de sus pi...

Inicia sesión y continúa leyendo