Capítulo 480

La luz del sol se filtraba perezosamente a través de la ventana.

En su sueño, Christina de repente escuchó un ruido y sintió una sensación fría en su piel. Abrió los ojos somnolienta.

Sebastian estaba arrodillado en la cama, sosteniendo un tubo de ungüento.

Despertó de golpe, el sueño desaparecie...

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