Capítulo 28

Charles

Ella iba a ser mi perdición. No estaría satisfecha hasta que la arrastrara a uno de los salones, la arrojara en el sofá y la tomara de la manera que tan claramente deseaba. Todos mis planes al diablo. Los días pasaban en un torbellino de actividad, y aún podía saborear su deseo en mi lengua...

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