Capítulo 15

Pasó mis dedos por su rostro, sujetándome la mano con firmeza cuando intenté apartarme. Estaba bien afeitado, suave, pero innegablemente masculino. Su tacto era simple, pero específico, destinado a mostrarme que podía ser como un amante, tierno, íntimo, pero también que era un hombre poco acostumbra...

Inicia sesión y continúa leyendo