CAPÍTULO 3: MI HERMANA MAYOR

POV de Sunny

—Mira, voy a organizar una fiesta de bienvenida para ti la próxima semana, ¿de acuerdo? No olvides llamar a tus amigos, especialmente a Natalie. Estoy segura de que estará encantada de verte —dijo mamá. Puedo escuchar a los tres hablando desde la sala de estar, aunque estoy lavando los platos aquí en la cocina.

—¿Una fiesta de bienvenida? ¡Claro, mamá! ¡Realmente extrañé mucho a mis amigos! Estoy segura de que se sorprenderán al saber que ya llegué.

La favorita de mamá. Ha sido su bebé desde siempre. Antes estaba celosa de ella, pero ya no. Mi hermana es amable, confiable y puede que me moleste mucho, pero me quiere mucho. No soy buena peleando o discutiendo con alguien, por eso ella siempre es la que pelea por mí.

—¿Has llamado a Henry también? Estoy segura de que estará muy contento de verte de nuevo —escuché decir a mamá otra vez.

Mi corazón de repente se aceleró. Ha pasado bastante tiempo desde la última vez que escuché su nombre. Henry fue mi primer amor, me ha gustado durante diez años. Mi hermana y yo lo conocimos en nuestras clases de piano, él es cinco años mayor que nosotras y ya trabaja como instructor de música en una universidad. Pero, por supuesto, a Henry le gusta mi hermana. Intenté confesarle mis sentimientos antes, pero me dijo que solo me veía como una hermana menor. A Mira también le gusta, pero él ya tiene novia, así que mi hermana y yo nos emborrachamos una noche de verano y mamá nos regañó toda la noche y el día siguiente.

—Ya lo llamé y dijo que vendrá.

Sonreí. Podré ver a Henry de nuevo.

Después de lavar los platos, volví a mi habitación y me di un baño. Me sorprendí cuando de repente vi a Mira acostada en mi cama mientras hablaba con alguien por teléfono.

—¿Qué haces aquí? ¡Mamá ha limpiado tu habitación para ti! —le gruñí. Ella abrió los ojos como platos y me hizo callar porque todavía estaba hablando con su novio, supongo. Sigue sonriendo como una idiota, así que estoy segura de que es su novio.

Me senté en el otro lado de mi cama y comencé a secarme el cabello con la toalla.

—Vamos al centro comercial mañana, te compraré algo de ropa —dijo de repente Mira.

—Mañana tengo que ver a alguien —respondí. Ella se levantó de la cama y se sentó a mi lado.

—¡Oh Dios mío, ya tienes novio! ¡Estoy tan orgullosa de ti, mi SUNSUN! ¡Finalmente creciste! —dijo mientras me abrazaba muy fuerte.

—¡No puedo respirar! ¡Suéltame ya! —protesté. Pero no me soltó, empezó a darme besos por toda la cara.

—¡Ugh, ya para, Mira, no tengo novio!

Dejó de besarme, así que rápidamente me alejé de ella y me limpié la cara con la toalla.

—Entonces, ¿con quién te vas a encontrar? —preguntó.

—Me voy a encontrar con mi editor.

—¿Editor? ¿Eres escritora? —preguntó como si estuviera muy sorprendida. Solo asentí con la cabeza.

—Sunny, todavía estás estudiando. Eso podría distraerte.

Ah, claro, escribir causaría distracción, pero tener novio no.

—Puedo hacer ambas cosas al mismo tiempo —dije. Puse mi toalla en el cesto y me senté en la silla giratoria para seguir puliendo el borrador de otra historia que presentaré a mi editor mañana.

—Oh, ¿de verdad? ¿Por eso reprobaste cinco de tus siete materias el semestre pasado?

Mamá probablemente se lo dijo. No soy tan inteligente como mi hermana, no destaco en nada, bueno, excepto en nuestra materia de literatura. Ni siquiera me interesa estudiar, solo quiero estar en mi habitación todo el día, escribiendo historias.

—Sunny, en dos años te graduarás si te va bien. Pero si sigues sin interés en estudiar, podrías no graduarte en absoluto.

Ahí va de nuevo.

—¿Ya tienes novio? —le pregunté, solo para cambiar de tema.

—¿Q-Qué? —Moví mi silla hacia ella y puse mis manos bajo mi barbilla mientras le sonreía.

—Por tu reacción, creo que ya tienes uno.

Desvió la mirada. Oh, mi linda hermana mayor, realmente no puede mentirme. Es tan mala mintiendo porque su cara se pone automáticamente roja cada vez que lo hace.

—¿Cómo se llama? —le pregunté. Mira se acostó en mi cama, alcanzó una almohada y la abrazó.

—No es mi novio todavía, pero creo que también le gusto...

—¿Cómo lo sabes? ¿Ya te confesó? —Sus ojos color avellana brillaron. Negó con la cabeza mientras sonreía.

—No hizo nada, pero me dijo que es feliz cuando está conmigo.

Fruncí el ceño.

—Espera, ¿es de Londres?

—No. En realidad, no lo he visto en cinco años y casi perdimos contacto, pero me alegró saber que no cambió su número, pude llamarlo hace un rato.

—Entonces, ¿lo conoceré la próxima semana?

Ella sonrió.

—Te lo presentaré.

Ahora me pregunto cómo será ese chico. No recuerdo que le gustara otro chico aparte de Henry. O tal vez sí conoció a alguien, pero tenía miedo de decírmelo porque sabe que la voy a molestar. Pero por la sonrisa en su rostro que me mostró, supongo que ese hombre realmente la hace feliz en estos días. Ojalá consiga al hombre que realmente se merece esta vez. Si es Henry, estaría bien para mí. Admito que todavía tengo sentimientos por él hasta ahora, pero tenerlo como novio de mi hermana es otra historia. Estoy dispuesta a sacrificar mis sentimientos solo para que Mira sea feliz.

Dios sabe cuánto la extrañé, aunque no soy buena expresándolo. Sé que ella también lo sabe.