Capítulo 118

Sophia’s P.O.V

Miré a Nadia, con la boca ligeramente abierta, mi corazón latía tan fuerte que apenas podía escucharla, pero las palabras seguían llegando—afiladas, irregulares, como fragmentos de vidrio.

—¿Qué hizo?— susurré, el aire atrapado en mi garganta.

Ella no se inmutó. No parpadeó. Su exp...

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