Capítulo 42

P.O.V de Sophia

Esa noche, ni siquiera dudé.

Podía sentirlo en cada fibra de mi cuerpo—que si no me iba ahora, tal vez nunca podría hacerlo. Así que me moví como una mujer poseída, mis manos temblaban mientras metía solo lo esencial en el viejo bolso de viaje que tenía antes de que Tristan entrara e...

Inicia sesión y continúa leyendo