Capítulo 109

ISABELLA

Mis manos no dejaban de temblar. Odiaba lo nerviosa que estaba, cómo el miedo convertía cada nervio de mi cuerpo en estática. Estaba agradecida de que Levi estuviera aquí, aunque preferiría tragar clavos antes que admitirlo ante su cara engreída.

Y aún así, tenía razón—Dios, odiaba que tuvi...

Inicia sesión y continúa leyendo