Otra regla

¡clic!

Con los labios casi tocándose, Wayn jadeó cuando sintió que alguien lo apartaba de Jule.

Apretando los dientes, Zeus miró a Wayn con furia mientras lo sostenía por el cuello de la camisa.

—Maldito imbécil, ¿por qué invitaste a tu hermano...?

Sus ojos se desviaron de Wayn solo para no...

Inicia sesión y continúa leyendo