Capítulo 1637

Kevin instintivamente extendió la mano y levantó el cuello del suéter de Audrey, revelando sus amplios pechos, presionados juntos formando un profundo y atractivo escote. No llevaba sujetador.

Audrey soltó un grito de sorpresa, se sentó recta y miró a Kevin con furia.

—¿Qué diablos, Kevin? ¡Estiras...

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