El chico dorado

Jonathan, siempre Jonathan. Resulta que no ha cambiado, siempre ha sido la persona que más me entiende. Era extraño porque Jonathan siempre intentaba reconciliarse conmigo, aunque yo fuera la que estaba equivocada.

Respiré hondo y exhalé lentamente, mi cuerpo y alma se sentían mejor. Es cierto, el ...

Inicia sesión y continúa leyendo