Una muestra de horror

Las piernas de Christine, la última parte de su cuerpo libre para moverse, se frotaban entre sí en una danza desesperada y frenética. Sus ojos se pusieron en blanco, lágrimas corrían por sus mejillas, brillando en la tenue luz. Los cánticos de la multitud se volvían más fuertes, más intensos, pero n...

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