Capítulo 121

Aria

La mañana del evento amaneció brillante y clara, el tipo de día que parecía sacado directamente de un sueño. La luz del sol entraba por las ventanas de mi apartamento, proyectando charcos dorados en el suelo, despertándome con una sonrisa en el rostro.

Hoy era el día. Hoy era el día en que se...

Inicia sesión y continúa leyendo