Capítulo 96 Aclarando las cosas

ACLARAR LAS COSAS

LA NOCHE estaba tranquila, pero no podía detener mi corazón de latir. Me abracé a mí misma. En el silencio, podía escuchar el viento que casi me hacía tambalear.

Incliné un poco la cabeza. —¿Qué haces aquí?— pregunté, luego le lancé una mirada.

—Estoy aquí de vacaciones, y no espe...

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