Capítulo 227

Aria subió las escaleras con gracia, dejando a Lewis sentado allí, inmóvil.

Él la vio desaparecer, y después de un rato, tocó suavemente la punta de sus dedos.

Parecía como si su calor aún permaneciera, como si su aroma único todavía se aferrara a él.

Lewis mantuvo la vista en el lugar donde habí...

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