Capítulo 126

Pippin era, por supuesto, una fuente constante de alegría. Parecía prosperar en la nueva atmósfera pacífica, exigiendo más caricias en la barriga y disfrutando de paseos más largos en el jardín. Era una testigo silenciosa de nuestra felicidad, una extensión peluda y leal de nuestra familia.

Una noc...

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