21, El rescate

Ver a esa perra arrastrándose por Nash, como si estuviera a segundos de montarlo, dolía. Se sentía como si me arrancaran un pedazo del alma. Necesitaba alejarme y distraerme. Fue una suerte encontrar a Jane en la barra, luciendo un poco perdida. Me escapé de la mesa y me acerqué a ella.

—Hola. Espe...

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