Quiero que sufra

La luna había reemplazado la luz del sol que se había puesto hace horas. Desparramado en mi cama, me preparaba para otra noche sin dormir. Ya me había acostumbrado a ello.

Sí, la muerte de Aurora lo causó, pero ahora era peor. Desde que mi padre trajo a esta mujer, Carlo, de otra manada, las cosas ...

Inicia sesión y continúa leyendo