Capítulo treinta y dos (ii)

Capítulo tres

Eva

Después de colgar el teléfono con Ian, me quedé sentada en la mesa de la cocina mirando una mancha de agua en forma de corazón. ¿Cuánto tiempo había estado ahí? ¿Por qué la estaba notando justo ahora? Me hacía estas preguntas ridículas porque intentaba no pensar en el hecho de qu...

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