Capítulo cincuenta y tres: Un rescate de lo más obstinado

La plaza de la ciudad estalló en un caos de espadas y disparos, mientras el Capitán Banen y sus hombres se movían para rescatar a Charlotte antes de que los Arakesh atacaran, tal como Aya había sugerido. Sin embargo, ella no había sugerido que dispararan justo hacia su amiga mientras ella saludaba f...

Inicia sesión y continúa leyendo