221

Unas semanas después, cuando siento seriamente que no tengo nada más que darle al monstruo que es el brutal horario académico de Burberry Prep, encuentro a Zayd dormido en la biblioteca. Está tumbado boca abajo sobre su cuaderno, con un bolígrafo aún agarrado flojamente en su mano tatuada. Con cuida...

Inicia sesión y continúa leyendo