Sígueme, pequeño lobo

Observo a mi compañera destinada descansar profundamente en su nido con ese maldito zarigüeya extendido sobre su espalda encima de ella. Normalmente su lobo demandaría que se cambiara la sábana y se deshiciera del olor, pero su lobo se preocupa por su Raven.

Arranco un mechón de pelo de Ayla y lo c...

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