Colgaré tus entrañas en estas paredes

Raven

—¡NO LA TOQUES!— grito mientras el gas inunda la celda de Ayla desde el sistema de arriba. Los guardias se burlan y ríen mientras ella se desploma en su catre. Su padre, que no es su padre, está gruñendo y golpeando su celda. Tal vez si hubiera hecho algo hace diez años, su hija no estaría en...

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