Lilith

***Podía negarme todo lo que quisiera, intentar fingir que no había sentido nada, pero cuando estábamos en aquella mesa, Sam Brennan me había mirado como aquella noche en Schwarzlicht. Con ese mismo hambre salvaje que gritaba que iba a devorarme, que no dejaría nada de mí para el hombre que pudi...

Inicia sesión y continúa leyendo