Olvidarse del mundo

La luz del día se colaba tímidamente entre las cortinas de la habitación. Alicia abrió los ojos con lentitud, sintiendo el leve cosquilleo del sol en su rostro. Había dormido poco y mal, pendiente de cada suspiro, cada movimiento de Dante durante la noche. Se giró en la cama con cierto nerviosismo, ...

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