Capítulo 20 Dije que no, y eso es definitivo

El beso de James hizo que la cabeza de Emily diera vueltas, desorientándola mientras su aliento, caliente e intenso, se mezclaba con el aroma de su colonia única, saturando sus sentidos con una pasión cruda y desenfrenada. Su mano se deslizó bajo su ropa, subiendo desde su abdomen inferior en un mov...

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