Capítulo 368 Saltando al lago

Grace se paró frente a Milo, sus ojos brillaban con determinación mientras lo protegía de Charles. —Charles, enfréntate a mí en su lugar. Esto no tiene nada que ver con Milo. Todo es mi culpa. Haz lo que quieras conmigo, no me quejaré.

La expresión de Charles se volvió helada. —¡Apártate de mi cami...

Inicia sesión y continúa leyendo