Capítulo 16. Instinto de lobo macho

Vio a Rishima acurrucada en el sofá, con los ojos húmedos y los párpados enrojecidos que la hacían lucir irresistiblemente atractiva. Su rostro estaba sonrojado, como si estuviera cubierto por una capa de suave rosa, y verla así solo hizo que el lobo sintiera un impulso abrumador de aparearse.

Los ...

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